*El sueño de muchos, lo están haciendo realidad dos jóvenes puentealtinos de Las Vizcachas, quienes junto su perrita lucy salieron hace más de un año con destino al norte.

*Los aventureros ya han pasado por Perú, Bolivia, Brasil y Uruguay, donde han vivido experiencias para toda su vida.

*El estallido social del país lo están siguiendo casi a diario y se dan el tiempo para explicar qué pasa y del por qué las manifestaciones diarias.

Natalia Flores y Bruno Hernández, junto a su fiel can Lucy, están viviendo lo que todo el mundo, alguna vez, pensó o soñó: recorrer el mundo, vivir intensamente.

Arriba de su Camper Truck Dodge RAM 2500×4 diésel, acondicionada como una casa rodante, la pareja puentealtina ha llegado a puntos que no aparecen en los mapas turísticos.

         Allí, han encontrado el tesoro más preciado: gente con los brazos abiertos y siempre dispuesta a recibir al forastero, en especial al aventurero que también lleva consigo su cultura y sus ganas de aprender de otro y dar a conocer, a su vez, las cosas de su propio país.

Es lo que ha pasado con esta pareja puentealtina, que se despojó de todo, para vivir sin ataduras y sin la esclavitud del consumismo diario.

Casado hace cuatro años, desde el 2017 que emprendieron este proyecto de vida al que bautizaron como “Nómades: Hijos del Destino”, el que incluso tiene el patrocinio del Servicio Nacional de Turismo.

El 6 de agosto del año pasado salieron desde Puente Alto con rumbo norte, viaje que los tiene ahora en Uruguay, tierra que los ha recibido con bondad y amistad sincera.

A 365 días de salida de Chile y estando en Río de Janeiro, Bruno sintetizó ese momento de la siguiente forma:

“Hace un año salíamos definitivamente de Santiago, dejando a las personas que amamos para hacer realidad lo que durante mucho tiempo soñamos. Hoy, después de un año, volvemos a partir de un lugar que nos albergó por dos meses y días, donde, construimos una familia. Cuesta, se aprieta el pecho, pero, la ruta continúa y aún hay mucho por conocer…seguimos ruta, agradeciendo tanto amor, agradeciendo a la vida el haber conocido personas tan hermosas, agradeciendo tener la posibilidad de vivir así ‘nómades’, agradeciendo el poder despojarnos de prejuicios y aprender a desaprender los miedos, agradeciendo el ser más conscientes, agradeciendo el disfrutar a tanto ser humano bello y diferente, agradeciendo el ser más tolerantes, agradeciendo la vista majestuosa con la que despertamos cada día, agradeciendo la amistad…

Gracias a la vida que nos permitió llegar a Praia Vermelha, y vivir esta experiencia que marca para siempre un antes y un después de nuestro viaje, volvemos a partir agradeciendo para siempre”.

PEQUEÑO BALANCE

Al cierre de este reportaje, estos aventureros puentealtinos han recorrido casi 35.000 kilómetros.

Pasaron por todas las regiones de Chile, desde Puerto Williams a Arica (Visviri).

Luego,  un poco de Bolivia, Perú (costa, altiplano y selva), 9 estados del gran Brasil, la mitad de Paraguay, norte y sur de argentina (de Posadas a Ushuaia) y hasta la fecha 8 estados de Uruguay.

Solo un ejemplo de que el camino se hace al andar.

Estuvieron dos meses en Río de Janeiro donde pudieron conocer una de las siete maravillas del mundo moderno: el Cristo Redentor.

“Fue toda una osadía, ya que buscamos la alternativa más económica de llegar y la encontramos.

Llegamos al Parque Nacional La Tijuca y ahí comenzamos un trekk cuesta arriba, subimos tres kilómetros el majestuoso Corcovado, “de graça” como dicen aquí (gratis), por lo que solo tuvimos que costear el ingreso: 28 reales por persona ($5.000 chilenos).

La verdad, es que la vista hacia Rio es alucinante, y el Cristo imponente!!! Un imperdible de la ciudad!!! El único “pero” es que si no vas temprano, parece paseo ahumada, jajaj pero bueno, es muy gracioso ver como toda la gente lucha por la mejor foto, de espalda tirados en el suelo, por entremedio de las piernas. Fue sin duda, una gran experiencia”, relató Bruno.

¿Qué les ha dejado esta vuelta por Sudamérica? ¿Qué es lo que rescatan como puentealtinos?

-La verdad ha sido un cofre con tesoros, un baúl de tesoros. No solo por los paisajes, los lagos, los ríos, las montañas, las playas, sino más bien por su gente, por la calidad de gente que uno va encontrándose en el camino y por la solidaridad que tienen estas diferentes personas y poder alinearse con tu proyecto de vida, con tus sueños y hacerse partícipe de una u otra forma.

Efectivamente las personas han sido la guinda de esta torta tan maravillosa que nos ha tocado vivir.

Eso es lo que nos deja, personas lindas, llena de solidaridad y rescatando de ellos una mirada muy crítica de los procesos, la forma de vida que tiene cada pueblo, comunidad y país. Sabemos que no vivimos en una burbuja y que tenemos como vecinos con países muy hermosos y llenos de cultura.

Bruno y Natalia planificaron estos viajes intensos por tres años, ahorrando de distintas formas y organizando un nuevo estilo de vida.

EL ESTALLIDO DESDE AFUERA

Cómo jóvenes y con una mirada poco común de la vida, estos chicos puentealtinos están expectantes de lo que está pasando en el país y del estallido social que se vive desde el 18 de octubre pasado.

Las masivas manifestaciones y el descontento generalizado que se ha expresado en la calle por más de dos semanas los tomó por sorpresa, como a muchos, en Uruguay.

Allí, han sido objeto de consultas y preguntas por la situación de país, que se veía un modelo a seguir por una parte de la sociedad uruguaya y algunos candidatos.

“Está potente la cosa;  mucha energía liberada y sin duda buscando cambios que nos transformarán en una mejor sociedad. Desde afuera se ve con mucho respeto, admiración  y coraje.

Porque sabes que acá, en época de elecciones, a Chile lo miran como modelo económico y social algunos candidatos.

         Pero a raíz de esta catarsis, muchos han dudado del modelo que se estaba tratando de replicar o tomar como referencia. Vamos a ver qué sigue”, dice Bruno en conversación con Reportajes de Puente Alto Al Día.

Me imagino que como jóvenes desearían estar en el país y ser parte también de este proceso.

-Sí. Ahora estamos de regreso a Chile, aunque no tenemos fecha de llegada. Puede ser en uno o dos meses más con el fin, en parte, de alimentarnos de esa energía que no hemos tenido por casi dos años y por otro lado de hacernos partícipes, de una u otra forma, de este proceso que para nosotros es súper importante, al igual que para nuestra familia, amigos y todos los chilenos.

Desde afuera se ve con mucho orgullo y respeto lo que está pasando en Chile y con mucha admiración también porque no es solo un proceso a nivel nacional, sino que también a nivel mundial.

Todos los países, de alguna u otra medida, tienen injusticias o tienen procesos por los cuales están pasando.

Es esa la mirada que se tiene desde afuera.

Como ya lo adelantó el propio Bruno, en unos dos meses más volverán a Chile y a su Puente Alto querido, donde contarán sus experiencias y retomarán energía, aunque esta vez tiene que ser el doble, ya que el desafío y el sueño es grande.

Bruno y Natalia, más la compañía de Lucy, tienen pensado saltar el charco del Atlántico e ir a Europa.

Desde allí quieren ir a Asia, Medio Oriente y África.

“¿Alaska?, va esperar un poco” apunta Bruno.

La aventura y las historias que han escrito estos jóvenes puentealtinos quizás inspiren a muchos a dejarlo todo por conocer ese mundo que está a la vuelta de la esquina.

Por eso, es que su mensaje es sostener ese sueño y creer que es posible hacerlo.

Tal como Bruno y Natalia lo expresan de la manera más simple y contundente a la vez:

“Alguna vez, pensamos que quizás no era posible, pero sí se puede vivir viajando, autofinanciarse y respirar libertad.

…antes, vivíamos para trabajar, ahora trabajamos un ratito… y vivimos.

-¿Y ustedes chiquillos se animan con este estilo de vida?

Si tienen alguna pregunta o necesitan información o asesoramiento para tomar la decisión y partir… no duden en escribirnos.

¡Nosotros los estaremos esperando en la ruta!